La jornada fue denominada como ”Juventud de la Vejez” y fue dirigida por la Red de Jóvenes Líderes de Moca. Se beneficiaron los 50 adultos residentes en el Hogar para Ancianos Desvalidos La Santísima Trinidad.
Un grupo de chicos y chicas de la provincia de Moca, participantes en las diferentes iniciativas del Proyecto de Formación de Jóvenes Líderes por el Progreso y la Paz, del Despacho de la Primera Dama, organizaron una mañana feliz para los y las envejecientes que residen en el Hogar para Ancianos Desvalidos La Santísima Trinidad.
Los jóvenes convirtieron los pasillos y el patio del Hogar en un gran salón de belleza donde arreglaron las uñas, recortaron el cabello, peinaron y lavaron el pelo de las personas mayores con cuidado y delicadeza.
“Hoy en este lugar hemos puesto en práctica lo que hemos aprendido durante los entrenamientos recibidos por el Despacho, tanto en “Yo y 10” como en el Proyecto de Formación de Jóvenes Líderes por el Progreso y la Paz. Es algo que vamos a hacer regularmente donde se nos necesite. Esto nos hace sentir muy bien”, cuenta Elide Jiménez.
La directora del asilo, Sor Isabel Ventura, se mostró agradecida con la jornada realizada por los jóvenes. “Es muy reconfortante ver a los más jóvenes sensibilizarse con esta causa. Aquí tratamos de darles el mejor trato a los ancianitos, pero cuando viene visita la cosa cambia. Ellos se sienten muy bien, y me gustaría que esta no fuera la única vez, sino que lo hagan de manera rutinaria, así le hacemos la estadía más feliz”, dijo.
También los ancianitos expusieron su alegría con la visita de los integrantes de los programas que promueve el Despacho de la Primera Dama. “Me ha encantado que ustedes hayan venido a traernos alegría y esa fuerza de la juventud que tienen. Aquí nos tratan muy bien y tenemos con quien hablar, pero cuando llega gente nueva uno se siente diferente. Me he sentido muy feliz hoy por ustedes, espero que vengan pronto”, dice Ana Rita Salcedo, de 62 años.
Además de atenciones de belleza, los jóvenes apoyaron en el aseo de las instalaciones en la recolección de basura, la limpieza de los pisos, entre otras actividades.
Solidaridad contagiada
Maria Mercedes Sánchez, Mercedes Castillo y Marina Ovalles, madres de jóvenes involucrados en el Proyecto, asistieron a colaborar con la causa motivadas por el cambio que han experimentado sus hijos luego de participar en los diferentes adiestramientos del programa.
“Mi hija Leasy Aponte, es del grupo “Yo y 10”, en estos momentos ella está en el liceo y yo le dije que vendría por ella para suplir su falta. He visto el cambio que ella ha experimentado después de estar en este equipo y eso me motivó a venir y aportar con lo que yo sé, que es la peluquería, además de que a mí me gusta el servicio a los demás”, afirma María Mercedes Sánchez.